Gallus gallus

Familia : Phasianidae

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Texto © Dr. Davide Guadagnini

 

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Traducción en español de Lucio Zavala

 

El Gallus gallus, antepasado del gallo doméstico, puede encontrarse ahora, con varias subespecies, en una amplia franja de del sudeste asiático. Perturbado, emprende rápidamente el vuelo © G. Mazza

El Gallus gallus, antepasado del gallo doméstico, puede encontrarse ahora, con varias subespecies, en una amplia franja de del sudeste asiático. Perturbado, emprende rápidamente el vuelo © G. Mazza

El Gallo selvático rojo, o Gallo bankiva, o Gallo rojo de la jungla (Gallus gallus Linnaeus, 1758) pertenece al muy notable orden de los (Galliformes); a la familia de los Faisánidos (Phasianidae); al género Gallus y a la especie Gallus gallus.

Esta especie, junto con las otras especies congéneres Gallus sonneratii y Gallus lafayetii, forman una superespecie. El gallo selvático puede hibridarse localmente con el Gallo de Sonnerat o Gallo gris (Gallus sonneratii ).

En general, se han reconocido 5 subespecies:

Gallus gallus gallus (Linnaeus, 1758) distribuido por el este de Tailandia a través de Camboya, el centro-sur de Laos, hasta el centro-sur de Vietnam.

Gallus gallus spadiceus (Bonnaterre, 1791) distribuido desde el centro-sur de China (sudoeste de Yunnan), por Birmania, parte de Tailandia, en la península malaya, y el norte de Sumatra.

Gallus gallus bankiva (Temminck, 1813) distribuido por el sur de Sumatra, Java y Bali.

Gallus gallus murghi (Robinson & Kloss, 1920) distribuido por el norte y noreste de la India, en las adyacencias con Nepal y Bangladesh.

Gallus gallus jabouillei (Delacour & Kinnear, 1928) presente en el centro-sur de China (sudeste de Yunnan, Guangxi y Hainan) y el norte de Vietnam.

El nombre del género y el epíteto específico “gallus” derivan del nombre latino asignado por Linneo para esta especie (Phasianus gallus) y que, a su vez, deriva de la clasificación del pollo doméstico: “gallo de granja” o “gallina”, descendiente de esta especie selvática, asignada por varios autores: Gesner (1555), Aldrovandus (1599), Willughby (1676), Albin (1738 del “gallo Bantam” de “Bantam” en la India).

Zoogeografía

El gallo selvático rojo se distribuye, con varias otras de las subespecies, en una amplia franja del sudeste asiático: desde el norte de la India hasta la isla de Sumatra, Java y Bali, pasando por China, Tailandia, Laos, Vietnam y la península malaya. La especie está presente también en las Filipinas, en Sulawesi (Célebes) y en parte de las Islas menores de la Sonda; en esta área, la especie ha sido probablemente introducida.

Cuadro familiar en el sotobosque de la selva en Singapur. Se percibe notablemente un marcado dimorfismo sexual expresado por una fuerte diferencia de colores y formas en las plumas, por no hablar de la cresta y la barbilla. Además, el macho (65-75 cm) es mucho más grande que la hembra (42-46 cm), aquí retratada con dos pequeños ya crecidos. A través de su amplia área de distribución, ocupa diversos hábitats tropicales y subtropicales, incluso los bosques de manglares © Giuseppe Mazza

Cuadro familiar en el sotobosque de la selva en Singapur. Se percibe notablemente un marcado dimorfismo sexual expresado por una fuerte diferencia de colores y formas en las plumas, por no hablar de la cresta y la barbilla. Además, el macho (65-75 cm) es mucho más grande que la hembra (42-46 cm), aquí retratada con dos pequeños ya crecidos. A través de su amplia área de distribución, ocupa diversos hábitats tropicales y subtropicales, incluso los bosques de manglares © Giuseppe Mazza

El gallo selvático ha sido introducido en muchas áreas donde se ha asilvestrado nuevamente: en la Micronesia, en la Melanesia y en la Polinesia, en La Reunión y las islas Granadinas; probablemente también en Nueva Zelanda y en Sudáfrica.

Ecología-Hábitat

A través de su amplia área de distribución, ocupa diversos hábitats tropicales y subtropicales, incluso ambientes no aptos como los bosques de manglares. El gallo selvático rojo vive desde el nivel del mar hasta los 2000 m de altitud. La especie parece preferir terrenos planos o con pendiente ligera, en zonas de borde del bosque, y hábitats constituidos por bosques secundarios.

Las vocalizaciones del macho son más breves y menos agraciadas que las de gallo doméstico. Sirven para atraer a las hembras y como señal de advertencia para los machos inoportunos © Giuseppe Mazza

Las vocalizaciones del macho son más breves y menos agraciadas que las de gallo doméstico. Sirven para atraer a las hembras y como señal de advertencia para los machos inoportunos © Giuseppe Mazza

Morfofisiología

El macho, gallo, posee una longitud cercana a los 65-75 cm, y un peso de 670-1450 g. La hembra, gallina, posee una longitud cercana a los 42-46 cm y un peso de alrededor de 480-1050 g.

El gallo selvático rojo es el antepasado del pollo doméstico (con un poco de descendencia híbrida por parte del gallo selvático gris, Gallus sonneratii), seleccionado en todo el mundo con una vastísima variedad de formas, libreas, tallas y aptitudes reproductivas.

El gallo selvático rojo posee un marcado dimorfismo sexual, expresado por una intensa diferencia de colores y formas, de las plumas y de los apéndices carnosos de la cabeza (cresta y barbilla).

En el macho (gallo), el cuello (durante la estación reproductiva) presenta plumas más bien largas y abundantes de un predominante color anaranjado-rojizo-dorado, más matizadas de dorado claro en la parte centro-predistal del almófar (cofia) (las mismas se presentan marcadas de oscuro en algunas subespecies).

Las partes dorsales del cuerpo siempre son de color anaranjado. El ala presenta plumas remeras de color rojo ladrillo anaranjado, con la porción distal negra; coberteras intermedias de color verde oscuro iridiscente y pequeñas coberteras superiores de color rojo aterciopelado oscuro.

La cola es de color negro-verde-oscuro iridiscente, con reflejos violeta-azulados, y está constituida por algunas plumas falciformes muy características; la parte dorsal basal presenta una zona plumoso-suave de color blanco. El alto pecho es de color rojizo-anaranjado. El bajo pecho y las partes ventrales son de color negro con brillo intenso.

La cabeza está adornada por una típica cresta de color rojo, una barbilla péndula del mismo color, y por la piel facial siempre roja (pudiendo ser blanca o blanquecino-azulado-violácea a nivel de los orejones laterales en algunas subespecies).

El pico es de color gris-cuerno-amarillento y el iris es anaranjado. Las patas, más bien robustas, son las típicas de galliformes escarbadoras; están dotadas de cuatro dedos (con uñas): tres vueltos hacia delante y uno vuelto hacia atrás. Las patas son de color gris o gris-verdoso y están dotadas, sobre el “pie”, de un espolón punzante usado por los gallos para el combate con sus rivales conespecíficos. La hembra (gallina) posee un plumaje más modesto de color pardo-marrón. Las plumas del cuello resultan, sin embargo, más dorado-amarillentas marcadas de oscuro.

La librea de la hembra, y la de los pequeños, es extremadamente mimética en el sotobosque © Giuseppe Mazza

La librea de la hembra, y la de los pequeños, es extremadamente mimética en el sotobosque © Giuseppe Mazza

El marrón del cuerpo, más bien homogéneo, posee un aspecto ligeramente polvoriento; la parte del pecho es más rojiza, y presenta pequeñas y sutiles marcas más claras sobre las plumas coberteras de las alas y sobre las plumas laterales del cuerpo.

Las plumas remeras presentan un ligerísimo moteado oscuro y la cola es más negruzca. El pico es gris-cuerno y el iris es pardo-marrón. Cresta y barbilla son de reducidas dimensiones y poco rojizas (rosado opaco-gris oscuro).

El conjunto de estos caracteres en la hembra, determina un aspecto predominantemente críptico, fundamentalmente y sobre todo cuando anidan y se ocupan de la prole. También las hembras pueden presentar, a veces, pequeños espolones más o menos esbozados.

Etología-Biología reproductiva

El gallo selvático rojo posee hábitos alimenticios omnívoros y es oportunista, variando sus preferencias alimentarias de modo estacional, de acuerdo con la variabilidad de la disponibilidad trófica. Un estudio ha revelado que, en la India, el contenido gastrointestinal de 37 ejemplares estaba constituido por semillas de una treintena de especies de plantas, y por invertebrados pertenecientes a varios taxones.

Las plantas identificadas como alimento incluían los géneros Trichosanthes, Rubus, Carissa, Zizyphus y Shorea; la única especie aislada perteneciente a un taxón cultivado fue el arroz (Oryza). Una amplia gama de diferentes alimentos ha sido relevada también en el buche de 23 aves capturadas en Tailandia; estos alimentos incluyen frutos de plantas pertenecientes a la familia de las euforbiáceas (Euphorbiaceae) al género Zizyphus, y semillas de bambú (tribu Bambuseae).

Durante el cortejo, el macho no sólo se hace notar por su canto y sus plumas, sino que ofrece preciados regalos a su compañera. El gallo selvático rojo posee hábitos alimenticios omnívoros y es oportunista © Giuseppe Mazza

Durante el cortejo, el macho no sólo se hace notar por su canto y sus plumas, sino que ofrece preciados regalos a su compañera. El gallo selvático rojo posee hábitos alimenticios omnívoros y es oportunista © Giuseppe Mazza

Entre los insectos ingeridos, pudieron aislarse hormigas, coleópteros, termitas (¡casi mil en un único buche!) y sus huevos.

El gallo selvático rojo se reproduce en marzo-mayo, durante la estación seca; de acuerdo con las distintas áreas de distribución, el desove es muy variable. De hecho, en diferentes áreas de la India también se han hallado huevos entre enero y octubre; en Bangladesh se reproduce entre marzo y junio; en la península malaya se reproduce entre diciembre y mayo (con un pico entre enero y febrero); en China nidifica entre febrero y mayo (al menos por cuanto se ha visto en la región del sur de Yunnan). La especie posee hábitos polígamos. Los nidos pueden hallarse en muy diversos sitios, aunque se ubican típicamente en bosques secundarios, dentro de la vegetación densa, o en bosques de bambú. Se encuentran escondidos debajo de los arbustos o entre las matas de bambú. La puesta está constituida, generalmente, por 5-6 (4-10) huevos de color rosa claro-blanquecino, y la incubación, efectuada sólo por la hembra, dura 20-21 días.

Los pollitos, que son precoces, abandonan el nido siguiendo a la madre, que los acompaña en la búsqueda de alimento protegiéndolos y brindándoles calor. Los neonatos están recubiertos por un plumón de color pardo-marrón rojizo amarillento con estrías marrón oscuro-negruzcas en la parte dorsal de la cabeza (las líneas laterales de la cabeza contornean los ojos); las partes latero-ventrales son de color amarillo-blancuzco, con el pecho generalmente parduzco. Los jóvenes emplumados son, de pequeños (pollos), muy similares a la hembra, aunque los jóvenes machos son distinguibles precozmente por la tonalidad rojizo-amarillenta del almófar (cofia) y la espalda-dorso.

Las diferencias entre las distintas subespecies de gallo selvático rojo son reconocibles en mayor parte por las diferencias de color, de forma y de longitud de las plumas que forman el almófar-cofia (plumas del cuello) durante el periodo reproductivo.

Como sucede a menudo en los anátidos, también los gallos selváticos, pasado el periodo reproductivo, lucen una librea descolorida, llamada “de eclipse”. Cresta menos turgente y llameante, cuello sobrio oscuro-opaco y pérdida de las plumas acintado-delgadas de la región supra-cauda. Por lo tanto es menos visible a los predadores © Giuseppe Mazza

Como sucede a menudo en los anátidos, también los gallos selváticos, pasado el periodo reproductivo, lucen una librea descolorida, llamada “de eclipse”. Cresta menos turgente y llameante, cuello sobrio oscuro-opaco y pérdida de las plumas acintado-delgadas de la región supra-cauda. Por lo tanto es menos visible a los predadores © Giuseppe Mazza

Estas diferencias son evidenciables durante el periodo reproductivo porque esta especie (de modo análogo a cuanto he referido para muchas especies de anátidos) presenta una librea nupcial distinta de la segunda librea, no reproductiva, de eclipse.

Las diferencias existentes entre las dos libreas se concentran a nivel de las plumas del cuello: largas y variopintas (rojo-amarillo) durante el periodo de librea nupcial, y cortas y oscuras (negras o negruzco opacas) durante el periodo de eclipse, que aparecen luego de la muda estival y permanecen entre junio y septiembre.

Durante el periodo de eclipse, el gallo presenta también una cresta menos turgente y coloreada, y pierde las plumas acintado-delgadas de la región supra caudal, que constituyen una suerte de “chal” dorso-latero-caudal. Las plumas del cuello son más rojizas y redondeadas en la subespecie bankiva; puntiagudas y marcadas de oscuro en la subespecie murghi; y son de tipo intermedio en la subespecie jabouillei que también presenta las plumas del cuello y la cresta pequeñas, y ausencia de blanco a nivel de los “orejones” (lóbulos a nivel de las orejas). Las hembras de esta última son generalmente bastante más oscuras que las hembras del resto de las subespecies.

El gallo selvático rojo posee hábitos sedentarios, y simplemente no se hace presente en los climas que no sean agradables dentro de su gama, aunque al parecer, las aves descienden a altitudes más bajas en invierno, al menos en el norte de Tailandia.

Durante la estación del amor (aunque también fuera de este periodo) el gallo “canta” como hacen los bien notables gallos domésticos, pero, respecto a éstos últimos, emitiendo las vocalizaciones de modo más breve, con menos gracia, e interrumpiéndolas bruscamente (como “fragmentadas”). Las vocalizaciones del macho tienen por objeto atraer a la hembra, o bien servir de advertencia a los otros machos.

Los gallos selváticos rojos (y el pollo doméstico) emiten también una cierta variedad de vocalizaciones diferentes que, particularmente, advierten a sus conespecíficos la presencia de predadores aéreos o terrestres, provocando la consiguiente respuesta defensiva. Los gallos cortejan a las gallinas ofreciéndoles bocadillos (similar al modo en que lo hace la clueca con los pollitos) que son continuamente recogidos y dejados caer con el pico hasta que la hembra los acepta, picándolos de la tierra o directamente del pico del macho. La exhibición de cortejo también prevé el acercamiento a la hembra, tratando de circundarla con el propio cuerpo, extendiendo hacia la tierra el ala vuelta hacia de la hembra.

El gallo selvático rojo, al igual que sus especies congéneres, posee hábitos netamente terrícolas; el principal móvil del vuelo es el alcance de perchas nocturnas (ramas elevadas) o la huida ante eventuales predadores cuando se ve acorralado.

unque en Singapur los efectivos pueden contarse con los dedos de la mano, esta especie no se encuentra amenazada, pero corre el riesgo de extinguirse por hibridación con el pollo doméstico © Giuseppe Mazza

unque en Singapur los efectivos pueden contarse con los dedos de la mano, esta especie no se encuentra amenazada, pero corre el riesgo de extinguirse por hibridación con el pollo doméstico © Giuseppe Mazza

La especie, globalmente distribuida, está fuera de peligro gracias a su capacidad de adaptación; hemos visto que vive en una amplia variedad de hábitats, incluso en áreas con vegetación secundaria y ambientes artificiales como plantaciones de palma aceitera (Elaeis guineensis) y árbol del caucho (Hevea brasiliensis).

En Tailandia, el gallo selvático rojo, se considera común a pesar de ser víctima de una continua persecución. En Indonesia, la especie se encuentra en retroceso a causa de la caza y la pérdida de hábitat rápida y progresiva. No es particularmente común en Java, Sulawesi (donde es cazada intensamente) y las Islas menores de la Sonda; aunque es más común en Sumatra. En la India, las poblaciones de gallo selvático son más estables en las áreas protegidas, pero se encuentran en disminución en el resto de las áreas a causa de la degradación ambiental y la caza excesiva. La especie era localmente común en algunas áreas de Nepal, pero en los últimos años la población se encuentra en retroceso y desaparecida en algunas zonas.

En algunas áreas de su propio hábitat, la especie está protegida; desafortunadamente, la ley no provee norma alguna de protección.

Desafortunadamente también, la especie corre, en general, un grave riesgo de extinción a causa de la presencia de pollos domésticos criados libremente en los márgenes de los bosques, con los cuales puede hibridarse fácilmente.

El gallo selvático fue domesticado en Asia hace aproximadamente 5000 años, dando origen a las distintas formas domésticas (Gallus gallus domesticus), se ha difundido sucesivamente en todo el mundo, dando origen a una inmensa variedad de razas productivas (y también ornamentales); llegando a ser el animal más criado a nivel mundial, y la principal fuente de producción de proteínas de origen animal (carne y huevos) para la alimentación humana.

El gallo selvático rojo, tal vez a causa de su semejanza con algunas razas domésticas derivadas, no se encuentra presente en la mayoría de los aviarios ornamentales, y, cuando presente, se cría a menudo con un grado de pureza incierta. Las razas domésticas, descendientes del gallo selvático rojo, han sido seleccionadas para la producción de carne, huevos, plumas, para la riña y como ornamentales.

Las razas obtenidas son tantas y en tal medida diferentes entre sí, que algunas no guardan la más mínima semejanza con el progenitor selvático; algo similar a lo que ocurre con el lobo (Canis lupus) en comparación con algunas razas de perro (Canis lupus familiaris) de él mismo derivadas. Las razas domésticas de pollo han sido seleccionadas también por el color de los huevos que varían del blanco al rosa claro, al rosa oscuro-casi marrón, al insólito color azulado-verdoso de los huevos depositados por las razas seleccionadas en Sudamérica.

Sinónimos

Phasianus gallus Linnaeus, 1758.

 

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