Hoya obovata

Familia : Apocynaceae


Texto © Pietro Puccio

 

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Traducción en español de Ignacio Barrionuevo

 

La especie es originaria de Indonesia (Molucas y Sulawesi), donde crece epífita sobre árboles de las selvas húmedas.

El género está dedicado a Thomas Hoy (ca. 1750-1822), botánico y conservador de los jardines del duque de Northumberland; mientras que el epíteto específico es el adjetivo latino “obovatus, a, um” = obovado, en referencia a la forma de la hoja.

La Hoya obovata Decne. (1844) es una epífita trepadora siempreverde con tallos que pueden alcanzar varios metros de longitud provistos de raíces adventicias con las que se ancla a los soportes. Las hojas, sobre un peciolo de entre 1 y 2 cm, son simples, obovadas, con ápice redondeado o rara vez retuso, y margen entero recurvado, de entre 6 y 12 cm de longitud y de 5 a 8 cm de anchura, gruesas, brillantes, de color verde intenso con manchas dispersas de color gris plateado.

Las inflorescencias son axilares, en umbela, con incluso más de 25 flores de alrededor de 1,5 cm de diámetro y con corola de 5 lóbulos ovados con ápice obtuso, retroflejos, de color blanco ligeramente rosado, glabra externamente, papilosa en el interior, y corona con lóbulos casi romboidales, umbilicados en el centro, de color rosa intenso; las flores, de larga duración (alrededor de 2 semanas) emanan una agradable fragancia, en particular tras el atardecer, y producen abundante néctar transparente.

La Hoya obovata es una vigorosa epífita de Indonesia con tallos que trepan varios metros gracias a sólidas raíces adventicias © Giuseppe Mazza

La Hoya obovata es una vigorosa epífita de Indonesia con tallos que trepan varios metros gracias a sólidas raíces adventicias © Giuseppe Mazza

Los frutos son folículos fusiformes que contienen numerosas semillas provistas en un extremo de un penacho de pelos sedosos que favorecen su dispersión mediante el viento. Se ha seleccionado una variedad con hojas variegadas especialmente decorativa.

Se propaga por lo general mediante esqueje, con 2 o 3 nudos, en sustrato muy arenoso o agriperlita mantenido húmedo a una temperatura de entre 26 y 28 ºC, y por acodo aéreo. Menos frecuentemente se reproduce mediante semilla, en primavera tardía, colocada superficialmente en sustrato orgánico con adiciones de arena silícea en un 30 % y mantenido constantemente húmedo, aunque sin encharcamientos.

Es una especie discutida desde el punto de vista de nomenclatura, no existiendo consenso entre los estudiosos sobre si considerarla una especie o un simple sinónimo, a menudo confundida con la Hoya kerrii Craib. Es una especie vigorosa, de fácil cultivo y veloz crecimiento, cultivable al aire libre en regiones de clima tropical, subtropical y, marginalmente, templado-cálido, donde puede soportar, seca, temperaturas de pocos grados sobre 0 ºC, siempre que sean excepcionales y de corta duración.

Las corolas perfumadas, de alrededor de 1,5 cm de diámetro, duran dos semanas, reunidas en inflorescencias en umbela que portan incuso más de 25 flores © G. Mazza

Las corolas perfumadas, de alrededor de 1,5 cm de diámetro, duran dos semanas, reunidas en inflorescencias en umbela que portan incuso más de 25 flores © G. Mazza

Requiere temperaturas y humedad ambiental medianamente altas y elevada luminosidad, desde luz solar filtrada hasta sombra parcial. En lugares que no reúnan los requisitos climáticos puede cultivarse en maceta, guiada sobre soportes oportunos o suspendida como péndula, teniendo presente donde se va a colocar, ya que puede alcanzar, en tiempos relativamente cortos, grandes dimensiones. El cultivo en maceta permite resguardarla en invierno en un ambiente protegido particularmente luminoso, incluso con alguna hora de sol directo en la mañana, con temperaturas mínimas preferiblemente superiores a 14 ºC, aunque puede soportar, seca, algún grado menos sin daños.

Requiere un sustrato especialmente aireado y drenante, ya que las raíces se pudren fácilmente por agua estancada, y rico en materia orgánica, neutro o ligeramente ácido, y riegos regulares y abundantes en verano, aunque dejando siempre secar el sustrato antes de volver a regar, y más distanciados en invierno, de modo que siempre permanezca una ligera humedad; y en verano es útil efectuar nebulizaciones con agua no calcárea a temperatura ambiente cuando haya aire seco y elevadas temperaturas. Para abonarla pueden usarse los mismos productos recomendados para orquídeas epífitas. Los trasplantes han de realizarse cuando el sustrato da signos de deterioro, preferiblemente entre primavera y comienzos de verano, cuidando de no regar la planta durante varios días antes hasta que no se observan signos de crecimiento vegetativo.

 

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