
Texto © Giulia Ciarcelluti miembro API

Traducción en español por la Dra Cristina Valcuende

Colobus guereza tiene una distribución muy amplia que ocupa con 8 subespecies en África central © Hank Halsey
Colobus guereza (Rüppell, 1835), comúnmente conocido como
Guereza abisinio o Colobo oriental negro y blanco, es un primate del Viejo Mundo, perteneciente a la familia Cercopithecidae, subfamilia Colobinae.
El Guereza también se conoce como Guereza mantellata, Colobo blanco y negro oriental o Colobo abisinio.
En la clasificación científica, el género Colobus deriva del griego antiguo “κολοβός” (kolobós), mutilado, y evoca la falta del pulgar en este género, presente sólo en etapa embrionaria o como vestigio; el nombre de la especie, guereza, es en cambio el nombre etíope utilizado para designar a este primate. De acuerdo con lo reportado en la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).
Colobus guereza es una especie en bajo riesgo de extinción, ya que solo se encuentra amenazada localmente y en algunas áreas.
Zoogeografia
El rango de distribución del Guereza se extiende por toda África central.
Su territorio se expande hacia el este a partir de Nigeria, pasando por Camerún, Guinea Ecuatorial, Chad, Gabón, República Centroafricana, República del Congo, República Democrática del Congo,Sudán del Sur, hasta Etiopía, Kenia, Uganda, Ruanda y Tanzania. Esta amplia distribución está ocupada por las ocho subespecies de Colobus guereza, las cuales se distinguen por mínimas diferencias morfológicas y por el rango específico que ocupa cada una de ellas:
Colobus guereza guereza (Rüppell, 1835), muy extendido en los bosques de las tierras altas de Etiopía, al oeste del Valle del Rift y en las zonas bajas a lo largo del curso de los ríos Awash y Omo y en el desfiladero del Nilo Azul;
Colobus guereza caudatus (Thomas, 1885), presente entre el sur de Kenia y el norte de Tanzania, en los bosques montañosos del Kilimanjaro y Meru y en los bosques vecinos que se encuentran a altitudes ligeramente inferiores (Parque Nacional de Arusha);
Colobus guereza Occidentalis (Rochebrune, 1887), presente desde el este de Nigeria, Camerún y Gabón hasta la parte suroeste de Sudán y Uganda, al oeste del Nilo;
Colobo guereza matschiei (Neumann, 1899), presente en la parte sureste de Uganda (Monte Elgon), en Kenia al oeste del Valle del Rift y en algunos bosques internos del mismo, y en el noroeste de Tanzania, al norte del cráter del Ngorongoro y del río Grumeti.

Los machos miden una media de 64 cm, más una cola de 52-90 cm y un peso corporal de 8-13,5 kg © G. Mazza
Colobus guereza gallarum (Neumann, 1902), presente en una zona limitada de las tierras altas etíopes al este del valle del Rift
Colobus guereza kikuyuensis (Lönnberg, 1912), presente en las tierras altas de Kenia y al este del Valle del Rift, desde las colinas de Ngong hasta el monte Kenia y las montañas de Aberdare
Colobus guereza dodingae (Matschie, 1913), presente en las montañas Didinga, en la parte oriental de Sudán del Sur
Colobus guereza percivali (Heller, 1913), presente en una pequeña zona forestal cercana al monte Gargues en la zona de las montañas Matthews, en Kenia.
Morfofisiología
Guereza es la especie más grande entre los Colobinos.
Presenta dimorfismo sexual, que se puede encontrar tanto en el tamaño corporal como en el patrón del pelo en la región perineal: aquí los machos tienen callos isquiáticos blancos y continuos, mientras que en las hembras estos están separados por una franja de pelo negro.
Los machos tienen una longitud media de 64 cm, una cola que mide de 52 a 90 cm y un peso corporal de 8-13,5 kg.
En las hembras, la longitud media es de 58 cm, la cola mide 50-80 cm y el peso corporal es de 6-10 kg.
Con las ligeras diferencias necesarias entre las ocho subespecies, los Guereza tienen un pelaje negro corto con largos flecos de pelo blanco que discurren lateralmente al tronco, desde los hombros hasta las caderas, hasta cerrarse en U en la región lumbar: esta peculiaridad hace que los largos flecos blancos parezcan un manto. La longitud de las franjas blancas varía según la subespecie, aunque la tendencia general es mayor en aquellos individuos que viven en altitudes superiores.
La cola tiene un mechón de pelo largo y denso, que puede limitarse a la parte terminal o constituir la mayor parte de la cola.
El rostro, de color negro, tiene un marco de pelo blanco y un espeso pelaje blanco en las mejillas.
La nariz es aguileña y casi toca la boca.
Al nacer, los bebés guereza tienen la piel rosada cubierta de pelo blanco. Tanto la piel como el pelo se van oscureciendo a medida que se desarrollan, hasta que, a los 3-4 meses de edad, las crías adquieren la misma coloración que los adultos.
Como hemos visto con la etimología, este primate tiene sólo cuatro dedos, estando el pulgar ausente o reducido a un pequeño vestigio. Como miembros del género Colobus, de la subfamilia Colobine, no tienen bolsas en las mejillas.

Grupo de Colobus guereza Occidentalis, está presente desde el este de Nigeria, Camerún y Gabón hasta el suroeste de Sudán y Uganda, al oeste del Nilo © Valerie Hukalo
Ecología-Hábitat
Colobus guereza es un primate diurno y ocupa un hábitat compuesto por: bosques primarios y secundarios, tanto caducifolios como siempre verdes; bosques montanos húmedos tropicales; bosques de galería; sabana arbolada; Bosques presentes cerca de ríos y lagos.
Se encuentra en ambientes que alcanzan los 3300 m sobre el nivel del mar y también ocupa bosques secundarios que prefiere a los bosques vírgenes si ambos hábitats están disponibles: esta elección se atribuye a la mayor variedad de árboles de los que se alimenta y a las defensas químicas menos ofensivas de las hojas de las especies vegetales presentes en los bosques secundarios.
A menudo, debido a la deforestación, los Guereza se encuentra en zonas ocupadas por el hombre, en particular en plantaciones de eucaliptos, para compensar las posibles deficiencias nutricionales derivadas de la falta de fuentes alimenticias originales. La dieta es muy variada y se basa principalmente en frutas y hojas.

Arborícola y diurno, vive en bosques hasta 3300 m de altitud, alimentándose principalmente de hojas y frutos que recoge inmaduros, antes que especies competidoras. Esta dieta se enriquece de madera y corteza, semillas, flores, pecíolos, lianas y artrópodos. Al suelo se alimenta de plantas acuáticas o ingiere la arcilla de los termiteros © Giuseppe Mazza
Los frutos pulposos se comen verdes, para evitar la competencia con otras especies de primates que los prefieren maduros. En caso de amplia disponibilidad, Guereza prefiere las hojas frescas a las maduras. Otros alimentos que forman parte de la dieta son: corteza y madera, semillas, flores, pecíolos, enredaderas y artrópodos.
Ocasionalmente desciende al suelo para alimentarse de plantas acuáticas y comer la arcilla de los termiteros.
La cantidad de cada alimento en la dieta varía en función de la zona geográfica considerada y la época del año.
El Guereza digiere hojas y otras fibras vegetales gracias a las bacterias presentes en su peculiar estómago multicámara y muy complejo. La sinergia entre las bacterias anaeróbicas y los fluidos secretados por las glándulas salivales permite una digestión óptima de la celulosa de las hojas, haciendo nutricionalmente completa la dieta folívora de este primate.

Las hembras, más pequeñas, tienen callos isquiáticos blancos continuos, separados por una franja de pelaje negro © Giuseppe Mazza
Los depredadores naturales de la guereza son el Aguila coronada (Stephanoaetus coronatus), el Leopardo (Panthera pardus) y en ocasiones el Chimpancé (Pan troglodytes).
Etología-Biología Reproductiva
El Guereza normalmente vive en grupos pequeños y cohesivos de 6 a 10 individuos. El tamaño del grupo tiende a aumentar a mayores altitudes. Los grupos generalmente constan de un solo macho adulto (más de uno en grupos más grandes), algunas hembras adultas e individuos inmaduros. Los grupos con varios machos adultos son inestables y tienden a caer en una estructura de un solo macho adulto.
La organización de los grupos es matrilineal: hembras adultas e individuos inmaduros constituyen el núcleo principal. Dentro de un mismo grupo, y en algunos casos en grupos que viven en territorios vecinos, las hembras adultas están emparentadas entre sí.
Las hembras permanecen dentro del grupo de nacimiento, pero pueden dispersarse si el grupo se disuelve. Por el contrario, los machos abandonan su grupo de origen poco antes de la plena madurez, ya sea de forma voluntaria o tras ser ahuyentados por el macho adulto de su grupo. Habiendo abandonado el grupo natal, los machos llevan una vida solitaria o se unen con otros machos solitarios. En cautiverio las hembras no muestran una jerarquía, mientras que en la naturaleza existen relaciones de dominancia.
El ciclo reproductivo de las guerezas hembra dura aproximadamente 24 días. El intervalo entre dos nacimientos es de aproximadamente 22 meses, con un mínimo de 16 meses.
La tasa de natalidad es mayor en los hábitats forestales.
El apareamiento es fomentado por igual por la hembra y el macho. La invitación se produce acercándose a la potencial pareja y realizando chasquidos con la boca de baja intensidad y besos ruidosos. En grupos con más de un macho adulto, las hembras se aparean con más de un macho.
El período de gestación dura aproximadamente 158 días en estado salvaje, aproximadamente 170 en cautiverio.Sólo nace un bebé a la vez.
No existe un período reproductivo específico, aunque se encuentran picos estacionales cuando hay mayor disponibilidad de recursos

Se desplazan de un árbol a otro con saltos acrobáticos y rara vez descienden al suelo. Los principales depredadores son el Leopardo, el Aguila coronada y el Chimpancé © Charles G. Summers, Jr.
Las crías son el centro de atención de los demás miembros del grupo, especialmente de las hembras, que pueden cuidarlas e incluso transportarlas a distancias relativamente largas. Los machos comienzan a interesarse por las crías cuando alcanzan las 4-5 semanas de edad.
Los pequeños pueden ingerir alimentos sólidos entre las ocho y nueve semanas y a partir de la quincuagésima semana están completamente destetados.
La madurez sexual la alcanzan las hembras a los 4 años y los machos a los 4-6 años. En cautiverio pueden vivir hasta 30 años.
El acicalamiento mutuo (allogrooming) juega un papel importante en las interacciones de la especie y ocurre principalmente entre hembras; sin embargo, los machos adultos que viven en un grupo rara vez participan en él.
Durante el día, la Guereza alterna largos periodos de descanso con periodos dedicados a moverse y comer. Con menor frecuencia se dedica a acicalarse y jugar.

Vive en grupos cohesivos de 6-10 individuos. Los machos marcan su territorio durante la noche y el amanecer con poderosos rugidos. Las hembras dan a luz a una sola cría © Giff Beaton Kibale Nature Lodge, Uganda
Cuando los miembros de un grupo descansan, el macho se posiciona más arriba y ligeramente separado de los demás, para vigilar la presencia de otros grupos y posibles depredadores.
Mientras se mueven, todos los individuos permanecen juntos y siguen a un solo miembro que les muestra el camino.
El canal de comunicación más relevante son las vocalizaciones. Los machos de las guerezas emiten una especie de fuerte «rugido», principalmente de noche y al amanecer, tan potente que puede oírse hasta a un kilómetro y medio de distancia. Cualquier macho de otros grupos cercanos responde vocalizando a su vez. Se cree que esta vocalización es una conducta competitiva entre machos, encaminada también a mantener la distancia territorial entre grupos.

Las crías son el centro de atención de todo el grupo, especialmente de las hembras. Al nacer tienen la piel rosada y el pelo blanco. A los 3-4 meses adquieren el color de los adultos. En cautiverio su esperanza de vida es de unos 30 años © Johanna Kok
La defensa del territorio que lleva a cabo el macho adulto incluye vocalizaciones, sacudidas vigorosas del pelaje blanco, saltos, persecuciones y, raramente, ataques físicos directos. Además del rugido, también se emiten otro tipo de vocalizaciones. Los machos pueden emitir bufidos, quizás utilizados como señales de alarma. Antes de que los distintos miembros del grupo comiencen a moverse pueden emitir un «ronroneo».
Las hembras y las crías pueden «grazar» cuando se encuentran en circunstancias incómodas, mientras que en situaciones de mayor estrés, por ejemplo cuando una cría está en peligro, las hembras y los subadultos envían señales de alarma con gritos. En contextos intergrupales agresivos, además de vocalizaciones, Guereza utiliza señales visuales como agitar los flecos de su pelaje o asumir expresiones faciales y/o posturas corporales particulares.
Colobus guereza vive en territorios bien delimitados, con una extensión aproximada de 13 a 16 hectáreas, con raros solapamientos entre territorios vecinos. Los encuentros con individuos de otros grupos no son amistosos. En cambio, muestra tolerancia hacia aquellas especies de primates con las que comparte hábitat, y en particular hacia las pertenecientes a los géneros Cercocebus y Cercopithecus.
Conservación
Las principales amenazas a la conservación de Colobus guereza son principalmente la destrucción del hábitat y la caza, la piel y la caza.
Durante siglos, el Guereza ha sido cazada para utilizar su piel en el mundo de la confección:
Marco Polo ya atestigua la presencia en China de capas hechas con pelo de Guereza. En el siglo XIX incluso provocó su extinción en algunas zonas, con un pico en la época de la Primera Guerra Mundial, cuando la «piel de mono» se extendió por toda Europa.
Se estima que durante el período de mayor demanda murieron entre uno y dos millones de individuos . La caza ilegal continúa en pequeña medida hoy en día, por parte de tribus locales que se alimentan de carne del Guereza y utilizan el resto del animal con fines ornamentales.
La subespecie Colobus guereza dodingae fue avistada por última vez en la década de 1960 y no está presente en ninguna zona protegida. La probabilidad de que esté extinto es muy alta, aunque se necesitan investigaciones profundas para confirmarlo.
En la Lista Roja de la UICN aparece globalmente como “LC, Least Concern“, es decir de menor preocupación, pero la subespecie Colobus guereza caudatus del Kilimanjaro ya está en la categoría “VU, Vulnerable“.
El Guereza es una de las muchas especies de primates sagrados para las religiones hindú y budista, en las que representan iconos de sus dioses.
→ Para nociones generales sobre los Primates ver aquí.
→ Para apreciar la biodiversidad de los PRIMATES clicar aquí.