Corypha taliera

Familia : Arecaceae


Texto © Pietro Puccio

 

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Traducción en español de Ignacio Barrionuevo

 

Corypha taliera llega a 10 m de altura con un tallo de 70 cm de ancho. Extinta en estado salvaje, solo sobreviven plantas nacidas de semilla en varios jardines botánicos © Giuseppe Mazza

Corypha taliera llega a 10 m de altura con un tallo de 70 cm de ancho. Extinta en estado salvaje, solo sobreviven plantas nacidas de semilla en varios jardines botánicos © Giuseppe Mazza

La especie es originaria de los bosques de Bangladesh, India (Bengala Occidental) y Myanmar.

El nombre genérico deriva del sustantivo griego “κορυφή” (coryphe) = cima, punta, haciendo referencia probablemente a la gran inflorescencia terminal; mientras que el epíteto específico deriva del nombre local bengalí. Nombres comunes: dhaka plant, gebang palm, tali palm (inglés); talier (Bengala); tara, tahreet (India); tali (sánscrito).

La Corypha taliera Roxb. (1820) es una especie solitaria de lento crecimiento, monoica, monocárpica (florece una sola vez y después muere), con un tallo cilíndrico imponente, de hasta alrededor de 10 m de altura y 70 cm de diámetro, de color pardo, rugoso, con los restos de la unión del peciolo de las hojas ya caídas. Las hojas, sobre robustos peciolos de hasta 3 m de largo provistos en su borde de cortas espinas marrones y brillantes, son numerosas, costapalmadas, más o menos circulares, hendidas en 80-100 segmentos linear-lanceolados, rígidos, los laterales con ápice acuminado y los medianos bilobulado, de color verde intenso brillante, de alrededor de 2,5 m de longitud en el centro y 10 cm de ancho, unidos en la base a lo largo de la mitad de su longitud.

Las hojas, sobre robustos peciolos de hasta 3 m de largo provistos en su margen de cortas espinas marrones y brillantes, son enormes, casi circulares. Las semillas contienen compuestos bioactivos con virtudes medicinales © Giuseppe Mazza

Las hojas, sobre robustos peciolos de hasta 3 m de largo provistos en su margen de cortas espinas marrones y brillantes, son enormes, casi circulares. Las semillas contienen compuestos bioactivos con virtudes medicinales © Giuseppe Mazza

La inflorescencia es terminal, erecta, piramidal, ramificada, de entre 3 y 5 m de longitud, con una vistosa masa de minúsculas flores subsésiles hermafroditas de color blanco amarillento, fragantes, con una corola formada por 3 pétalos cóncavos y carnosas, un ovario trilobulado y 6 estambres. La floración tiene lugar cuando la planta ha alcanzado una edad de entre 60 y 80 años, durante los cuales la palmera ha acumulado en el tallo una gran cantidad de almidón que se transforma en azúcares para la producción de la inflorescencia. Los frutos, que tardan en torno a un año en madurar, están constituidos por entre 1 y 3 drupas unidas, aunque más frecuente están solitarias con los restos de las otras dos en la base, cada una de entre 3 y 4 cm de diámetro, de un color que va del verde amarillento al verde oliva oscuro, y contienen una sola semilla globosa, de entre 2,5 cm de diámetro, particularmente dura y de color blanco. Una vez termina la maduración de los frutos, la planta, como hemos dicho, muere.

Se propaga mediante semilla en sustrato arenoso rico en materia orgánica a una temperatura de entre 26 y 28 ºC, utilizando contenedores más bien profundos, con un tiempo de germinación de en torno a los 6 u 8 meses.

La especie está incluida en la lista roja de la UICN (Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza) como “extinta en estado salvaje” (EW, Extinct in the Wild), ya que el último ejemplar presente en el campus de la universidad de Daca, cuyo origen “natural” no está del todo claro, murió tras su floración en 2012. Actualmente (2017) los únicos ejemplares adultos en cultivo, obtenidos a partir de semillas de una planta cultivada en el Jardín Botánico de Calcuta-Howrah (Bengala Occidental), están presentes en ese mismo jardín y, desde 1996, en el Centro Botánico Montgomery de Miami (Florida), aunque además de estas deben considerarse las alrededor de 300 plantas jóvenes obtenidas de semillas de la planta de Daca y distribuidas a varias instituciones botánicas indias.

Parecida a la Corypha umbraculifera, comparte con esta el récord de hoja palmada más grande, aunque no las condiciones de cultivo. Los estudios realizados a frutos de la planta florecida de Daca revelaron la presencia de numerosos compuestos bioactivos con interesantes propiedades antimicrobianas, antioxidantes y citotóxicas.

Sinónimos: Taliera bengalensis Spreng. (1825); Taliera tali Mart. ex Blume (1830); Corypha martiana Becc. ex Hook.f. (1892); Corypha careyana Becc. (1921).

 

 

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