Familia : Solenostomidae
Texto © Giuseppe Mazza
Traducción en español de Carlos Jiménez
El Pez fantasma adornado, Solenostomus paradoxus (Pallas, 1770), pertenece a la clase Actinopterygii, los peces con aletas radiadas, y al orden de los Syngnathiformes, que tiene 5 familias relacionadas por la anatomía de las mandíbulas, soldadas para formar un especie de tubo, además de los adultos del género Bulbonaricus que la pierden durante su desarrollo.
Se trata de los Aulostomidae, conocidos como peces trompeta; los Centriscidae, el famoso pez navaja; los Fistulariidae, el pez flauta; los Syngnathidae, que incluyen peces pipa y caballitos de mar; y los Solenostomidae, los peces fantasma, con un solo género, Solenostomus, y 5 especies con caracteres intermedios entre los caballitos de mar y los peces pipa.
El nombre de este género, creado por Lacépède en 1803, proviene del griego «σωλήν» (solen) = canal, tubo y στόμα (stóma), boca, debido a la boca en forma de tubo que hemos mencionado, mientras que el término específico paradoxus derivado del griego antiguo “παράδοξος” (paradoxos), paradoja, se refiere en latín a la apariencia ciertamente inusual del cuerpo.
Zoogeografía
Solenostomus paradoxus vive en el Indo-Pacífico occidental. Está presente en el Mar Rojo, a lo largo de las costas de Tanzania y las islas adyacentes de Comoras y Mayotte.
También se encuentra en las islas de la Reunión, Mauricio, Maldivas, Andamán y en aguas de Malasia, Indonesia, Timor-Leste, Papúa-Nueva Guinea y Australia.
Hacia el norte, más allá de Palaos y Filipinas, ha colonizado las costas de Taiwán, China y Japón.
Avanzando hacia el este, está presente en Micronesia, Islas Salomón, Nueva Caledonia, Islas Marshall, Islas Fiji y Tonga, donde se ha descubierto recientemente.
Ecología-Hábitat
Incapaz de contrarrestar las fuertes corrientes, el Pez Fantasma Adornado vive en las zonas resguardadas de los arrecifes, donde caza al acecho, boca abajo como el pez trompeta chino (Aulostomus chinensis), casi invisible entre las ramificaciones de gorgonias y corales negros o los largos brazos plumosos de los crinoideos.
En cambio, no frecuenta las praderas sumergidas, ocupadas por los otros cuatro congéneres, que en cambio han imitado matices y aspectos del mundo verde.
Morfofisiología
Solenostomus paradoxus puede alcanzar los 12 cm de longitud, siendo las hembras más grandes que los machos, ya que es una especie hermafrodita protándrica, con hembras que en su juventud fueron machos.
Lo mismo ocurre, por ejemplo, en el Mediterráneo con la dorada (Sparus aurata) y varios habitantes de los arrecifes como el famoso Amphiprion ocellaris, protagonista de la famosa caricatura «En busca de Nemo», o la Rhinomuraena quaesita, que son todos peces que al nacer ya poseen ambos sexos, pero las gónadas masculinas maduran primero y sólo después toman el relevo las femeninas.
El cuerpo del pez fantasma adornado no tiene escamas, pero está protegido por 31-35 placas óseas.
La cabeza evoca un caballito de mar, con un hocico alargado. La boca tiene dientes diminutos, proporcionados al tamaño de las presas, en su mayoría gambas microscópicas como las del género Mysida, pero también sirven para mordisquear los pólipos de las gorgonias y corales negros o los brazos plumosos de los crinoideos.
Hay dos aletas dorsales.
La primera, con 5 radios espinosos, es relativamente grande, similar a las dos aletas pélvicas presentes en el lado opuesto del cuerpo. La segunda, con 17-21 radios inermes, y la aleta anal simétrica son en cambio pequeñas y transparentes, casi invisibles. Para verlos es necesario mirar con atención, justo antes del delgado pedúnculo caudal, los ensanchamientos tuberculosos del cuerpo que los sostienen.
Incluso las aletas pectorales no se notan a primera vista, pequeñas y transparentes con 25-28 radios suaves.
La aleta caudal, de forma ovalada, a menudo plegada como un abanico, está dentada y lleva, como todo el cuerpo, apéndices de piel miméticos similares a espinas.
El opérculo, al lado del ojo, tiene el diseño inusual de un tablero de ajedrez.
La librea, en parte translúcida o blanca, es extremadamente variable. Predominan el amarillo, el naranja, el rojo y el negro con tonos intermedios como el rosa, el morado, el azul y el marrón en imaginativas combinaciones dignas de un arlequín, como recuerdan varios nombres vulgares: Poisson-fantôme arlequin en francés, Harlekin Geisterpfeifenfisch en alemán y Harlekijn spookfluitvis en holandés.
En las hembras, las aletas ventrales se unen para formar, unidas al cuerpo, una bolsa incubadora para los huevos.
Los juveniles son casi transparentes, con los radios de la primera aleta dorsal, pélvica y caudal particularmente alargados.
Etología-Biología Reproductiva
Solenostomus paradoxus suele nadar solo o en pareja. Su biología aún es poco conocida, pero parece vivir alrededor de un año con un estado larvario y juvenil muy largo. En la práctica, los adultos tendrían, por tanto, el tiempo justo para reproducirse una vez antes de morir.
A diferencia de los caballitos de mar y los peces pipa que confían sus huevos a la bolsa del macho, aquí, después de la fertilización, se pegan a la parte interna de las aletas pélvicas de la hembra en su bolsa ventral.
Puede contener 350 huevos de menos de 1 mm de ancho, que eclosionan después de unas 3 semanas. Las crías son expulsadas poco a poco con contracciones respiratorias, como ocurre con los machos del hipocampo.
A pesar de su belleza inusual, el pez fantasma adornado obviamente no es apto para la vida en el acuario y, por el momento (2022), el cambio climático no debería afectarloe mucho, considerando sus múltiples posibilidades de alimento.
Afortunadamente para él, no es perseguido pro el ser humano y, considerando además la amplia gama, esta especie tiene un índice de vulnerabilidad muy bajo, casi un récord en el mundo de los peces, pues marca apenas 10 en una escala de 100.
Sinónimos
Fistularia paradoxa Pallas, 1770; Solenostomatichthys paradoxus (Pallas, 1770).